Bosque de Galicia

El Bosque de Galicia se alza en las laderas del monte Gaiás con cerca de doce mil árboles de especies autóctonas (robles, castaños, sauces, abedules, alisos, espiños, serbales, laureles…), un nuevo pulmón verde de 34 hectáreas que incrementa la biodiversidad de la zona y mejora el metabolismo ambiental de Santiago, al tiempo que contribuye a integrar la Cidade da Cultura en Compostela, favoreciendo que los visitantes se acerquen caminando.

Una red de sendas peatonales de 5 kilómetros favorece su uso como lugar para el paseo, el contacto con la naturaleza y para todos los aficionados a las actividades deportivas al aire libre. La trama de senderos permite, además, subir al Gaiás eligiendo itinerarios más o menos suaves, ofreciendo alternativas para todos los visitantes. Un sistema de iluminación LED de bajo consumo permitirá el uso de estas sendas en las horas sin luz natural. Además, en la cima del monte, se instaló una estación fotovoltaica que contribuye a la recuperación de esta energía. El sistema instalado ofrece una iluminación suave y funcional, que evita la contaminación lumínica.

El Bosque de Galicia cuenta con zonas de descanso y un hermoso mirador en lo alto donde descubrir una de las vistas más desconocidas de Santiago. En él, un banco orientado hacia el oeste ofrece una panorámica privilegiada para contemplar los atardeceres de Compostela. 

En la plantación de los árbores participaron decenas de ciudadanos y escolares, en un gesto que simbólicamente busca evidenciar que el Bosque de Galicia es el bosque de todos los gallegos. Este proyecto, que parte de la idea original de Eisenman Architects, es el resultado de la colaboración de cinco consellerías del Gobierno gallego: Cultura, Educación e Ordenación Universitaria; Medio Rural; Economía, Emprego e Industria, Infraestrutura e Vivenda, e Medio Ambiente e Ordenación do Territorio. El proyecto contó también con el asesoramiento de los técnicos de la Escola Galega da Paisaxe de la Fundación Juana de Vega y de forma particular de su directora Isabel Aguirre, reconocida paisajista que ha aportado a Galicia trabajos excepcionales, como el parque de San Domingos de Bonaval.

La selección de especies y las tareas de plantación se llevaron a cabo por parte de la empresa pública de Servizos Agrarios (SEAGA), con la participación de los miembros de AMICOS, Asociación de Familias de Persoas con Discapacidade Intelectual y la colaboración del Proxecto Landra en las plantaciones realizadas con escolares.

El trazado inicial de las sendas corresponde a Perea+Euroestudios, el mobiliario y diversas soluciones arquitectónicas, el diseño de iluminación, así como el trazado y solución final de las sendas son de RVR arquitectos.